En estos últimos meses, escucho hablar de los ODS (Objetivos de Desarrollo Sostenible de la Agenda 2030 de la ONU) como nunca hasta ahora. Pero los ODS no son nuevos, acaban de cumplir tres años.
Los ODS fueron aprobados por la Asamblea General de Naciones Unidas en septiembre de 2015, con metas fijadas para el año 2030, como sucesores de los Objetivos de Desarrollo del Milenio (ODM). Los ODM se plantearon en el año 2000, con objetivos a 2015, para hacer frente a la pobreza extrema y al hambre, para fomentar el acceso al agua potable y saneamiento, prevenir enfermedades mortales y ampliar la educación infantil, entre otras prioridades.
Según la ONU, los ODM lograron enormes avances, entre ellos: la lucha contra el sida y otras enfermedades (como la malaria y la tuberculosis) y la mejora en el acceso a fuentes de agua potable mejorada. Pero siguen existiendo enormes retos vinculados a la sostenibilidad, a nivel mundial, en los que seguir trabajando. Para ello, se establecieron los ODS, que incluyen nuevos aspectos como la lucha contra el cambio climático, el uso de energía asequible y no contaminante, la innovación y el consumo sostenible, la paz, la justicia y las alianzas.
«Estamos resueltos a poner fin a la pobreza y el hambre en todo el mundo de aquí a 2030, a combatir las desigualdades dentro de los países y entre ellos, a construir sociedades pacíficas, justas e inclusivas, a proteger los derechos humanos y promover la igualdad entre los géneros y el empoderamiento de las mujeres y las niñas, y a garantizar una protección duradera del planeta y sus recursos naturales”, señalaron los Estados en la resolución».
Otro aspecto que los diferencia, es que mientras que los ODM estaban dirigidos a países en desarrollo, los ODS son de aplicación a todos los países a escala mundial.
Alcance global
De hecho, con este alcance mucho más amplio, los diecisiete ODS con sus 169 metas, abarcan las tres dimensiones del desarrollo sostenible: la económica, la social y la medioambiental.
![Estos son los objetivos de desarrollo sostenible que marcan Naciones Unidas para la Agenda 2030](https://xn--rediseo-9za.iambiente.es/wp-content/uploads/2018/10/onu-objetivos-de-desarrollo-sostenible-de-la-Agenda-2030-1024x792.jpg)
Estos diecisiete Objetivos, que además están interrelacionados, son un llamamiento universal para que nadie se quede atrás, para que se lleven a cabo medidas para reducir las desigualdades y contribuir al cuidado del planeta.
Para ello, es necesaria la implicación de los gobiernos, de la sociedad civil y la ciudadanía, la comunidad académica, entidades y empresas, actores fundamentales.
Y hay que empezar por la sensibilización, porque los ODS sean conocidos a todos los niveles. De hecho, el Gobierno de España, que ha convertido a los ODS en su hoja de ruta, se ha fijado como objetivo que el 100% de la ciudadanía conozca la Agenda 2030 para el año 2020.
Solo un tercio de las empresas españolas los conoce
A nivel empresarial y según el informe Las empresas españolas ante la Agenda 2030 de la Red Española de Pacto Mundial, sólo el 31,3% de las empresas conoce los ODS de forma profunda, un 37,4% superficialmente y un 31,3% no los conocía. Con estos datos, desde la Comisión de Responsabilidad Social de la Confederación Empresarial de la Comunidad Valenciana vamos a trabajar en la sensibilización sobre los ODS y el intercambio de buenas prácticas de las empresas de nuestra comunidad.
Desde iambiente, también intentaré poner mi granito de arena con la sensibilización y comunicación de la Agenda 2030.
A quienes no hayan oído hablar de los ODS hasta ahora, les animo a que abran los ojos y se interesen. Como digo a nuestro personal de Hidraqua y empresas participadas, cuando imparto formación en desarrollo sostenible y tanteo para saber si conocen los ODS (por cierto, la mayoría no ha oído hablar de ellos hasta que se los explicamos): fijaos, porque a partir de ahora no vais a dejar de verlos.