Este 2020 ha habido el doble de mosquitos tigre en el Estado que el año anterior, según el proyecto Mosquito Alert. Los investigadores aseguran que este 2020 han recibido 1 798 notificaciones de observaciones de mosquito tigre, mientras que en 2019 fueron 885. Además, dicen que ha sido el año en el que se han registrado más por esta aplicación desde 2014. Según apuntan, en las dos últimas semanas la plataforma Mosquito Alert ha recibido más de 250 observaciones confirmadas entre octubre y noviembre.
El 2019, en el mismo período, se notificaron 116 mosquitos tigre, 9 de ellos en el mes de noviembre. Este noviembre de 2020, hasta el día 28 se han registrado 50 observaciones de mosquito tigre, cinco veces más que el año anterior. «Las densidades de mosquito tigre se explican siempre por dos factores, el clima y la conducta humana. Ambos son los que les proporcionan periódicamente puntos con agua, donde crían», apunta Frederic Bartumeus, codirector del proyecto e investigador ICREA en CEAB- CSIC y el CREAF.
Más mosquitos por el confinamiento
Así, el hecho de que la temporada de mosquitos arrancase con una primavera cálida y lluviosa favoreció que proliferaran durante los meses de mayo y junio. Además, según Roger Eritja, entomólogo del CREAF y del proyecto, el confinamiento podría haber tenido un papel relevante en estos datos. La razón la encuentra en la prohibición de viajar a segundas residencias durante marzo y abril, que pudo afectar en el mantenimiento de los jardines, piscinas y terrazas. Esto es lo que habría permitido que se pudiera acumular el agua que necesitan los mosquitos para multiplicarse.
Aparte de este aumento en primavera, en verano, por sexto año consecutivo, se registró temperaturas más altas de lo normal, con episodios intensos y repetidos de precipitaciones en la península.
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El hecho de que el verano se adelante, alargue y sea más intenso, junto con lluvias regulares, pueden beneficiar el mosquito tigre. Por un lado, las altas temperaturas permiten que las larvas se desarrollen más rápido, acortando el tiempo entre generaciones. Y eso da lugar a un crecimiento exponencial de sus poblaciones siempre que dispongan de lugares con agua donde reproducirse. Por otro lado, el calentamiento global, con una primavera y un otoño cálido, podría alargar su estacionalidad y favorecer que los mosquitos estén activos durante más días del año. ACN. Món Planeta