Es incolora, porque es transparente. Es inodora, porque no huele a nada. Y ¿es insípida?. Pues no. El agua sí tiene sabor y la del grifo tiene un valor sensitivo y gastronómico muy valorado.
Esto último fue la conclusión de la interesante cata de aguas que se celebró en el Museo de Aguas de Alicante. En esta ocasión, participaron chefs y sumilleres alicantinos. Una actividad organizada por Aguas de Alicante y Gastro Cinema, dentro de la programación de este certamen de cine y gastronomía.
María José San Román, chef Monastrell; Daniel Frías de La Ereta; Lorena Ríos, sumiller del Monastrell; David García Ramón, de Asia Gardens; María Dolores Mejía, directora de Mercalicante; Jaime Seva director de la escuela de alta cocina HESTIA Lucentum; Òscar y Jorge Cerdá, chef y sumiller del restaurante Jorge Gastrobar; Aitor Boix, del restaurante Fondillón; Miguel Orts, gerente Bodegas Más de Sella, Miguel Orts, gerente Bodegas Más de Sella, Isabel Fiestas, directora del Hotel Blue Line acompañaron a los coordinadores de Gastro Cinema, Vicente Seva y Manuel Sánchez, en esta particular actividad.
Agua a ciegas
La cata de aguas es una actividad sensorial en la que, a ciegas, se degustan aguas de procedencias diversas como el grifo, un pozo, mineral, de desaladora… Los asistentes valoran aspectos organolépticos, como el olor, sabor y color, y definen después sus preferencias y hábitos de consumo.
En esta cata se habló de la gran importancia del agua en la cocina. Todos los participantes destacaron su entidad, pues es necesaria en multitud de preparaciones de exquisitos platos.
Siempre la del grifo
“No es la primera vez que hago esta cata, me parece imprescindible e importantísimo comunicarlo a la sociedad, y no tener vergüenza de tomar agua del grifo, que es lo más rico que hay”, comenta Mª José San Román, chef de El Monastrell.
“Es una actividad muy instructiva y curiosa, hay que seguir consumiendo agua del grifo que aporta todas las sales minerales que necesitamos”, afirma Mª Dolores Mejía, directora de Mercalicante.
“La gente tiene que saber que en los restaurantes también se puede tomar agua del grifo”, reivindica Jorge Cerdá de restaurante Jorge Gastrobar. Idea que también resaltó Lorena Ríos, sumiller del Monastrell, donde se usa este tipo de agua.
Por su parte Daniel Frías de la Ereta, manifestó que es muy difícil distinguir el agua durante las catas, “no sabía que estaba tan buena, y nos han demostrado claramente que está riquísima. En nuestros restaurantes siempre cocinamos con agua del grifo y tenemos una fuente para los clientes”.
Cine y cocina
Gastro Cinema cuenta con la colaboración de la Diputación de Alicante, el Ayuntamiento de Alicante, Mercalicante, la Universidad de Alicante, Aguas de Alicante, Estrella Galicia, Coca-Cola y otras empresas colaboradoras. Cine y cocina van de la mano en este encuentro que celebra su cuarta edición. Su objetivo es difundir la gran cultura gastronómica de la provincia de Alicante y unirla al séptimo arte.
El agua del grifo tiene un papel protagonista en los fogones, su sabor y sus propiedades saludables hacen que sea un ingrediente indispensable en los recetarios de los mejores chefs.