El Parque Natural del Túria está desde 2022 protegido contra el fuego gracias a la infraestructura contra incendios más grande de Europa. Aproximadamente hace un año que el proyecto Guardian está en funcionamiento usando agua regenerada y creando, gracias a la vegetación con menor combustibilidad, auténticas barreras verdes contra el fuego. Las zonas forestales de Paterna y Riba-roja del Túria, llevan una año protegidas por el proyecto Guardian.
Proyecto Guardian, un año protegiendo el Parque Natural del Túria
El proyecto Guardian vio la luz de la mano de la colaboración público privada gracias a la unión los Ayuntamientos de Riba-roja del Túria y Paterna, Hidraqua, Medi XXI, la Universitat Politècnica de València, la Universitat de València y Cetaqua. Así mismo, colabora en este proyecto el Parc Natural del Túria (Generalitat Valenciana). Esta infraestructura contra incendios, que ha sido financiada en el 80% a través de fondos FEDER de la Unión Europea, está ubicada en las zonas de interfaz urbano-forestal del Parque Natural del Túria, concretamente en los municipios de Riba-roja del Túria y Paterna. De esta forma, con la puesta en marcha en 2022, más de mil hectáreas de zona forestal y más de quince mil residentes cuentan con una innovadora manera de luchar contra el fuego.
Desde su funcionamiento, según datos proporcionados por Hidraqua, la depuradora ha generado más de 41.000 metros cúbicos de agua regenerada, de la que el 60% ha sido destinada al sistema de prevención incendios, mientras que el resto se ha convertido en aportación al lago de la Vallesa.
El sistema está compuesto por cañones de agua regenerada que se emplean para el riego preventivo y de mantenimiento de las zonas que forman las barreras verdes de protección contra incendios de la interfaz urbano forestal, evitando el uso de agua potable. De hecho, durante este año los riegos se han utilizado como riegos de mantenimiento, para garantizar buen funcionamiento de la instalación; riegos prescritos, para mantener las condiciones de humedad; y riegos preventivos, en situaciones de riesgo por condiciones climáticas adversos.
El proyecto Guardian, una innovación sostenible
“El Proyecto Guardian ha supuesto para Riba-roja, un antes y un después en la prevención de incendios forestales en el Parque Natural del Túria, una zona castigada por los numerosos incendios que se han sucedido desde fatal suceso que en 1994 arrasó el bosque de la Vallesa, calcinando 200 hectáreas. Ahora se cumple un año de la finalización de las obras de la infraestructura contra incendios más grande de Europa y la segunda más grande del mundo y el balance es altamente positivo”, señaló el alcalde de Riba-roja del Túria Rober Raga.
Por su parte, Juan Antonio Sagredo, alcalde de Paterna, apuntó que «en un año tan complicado como el que hemos vivido en cuanto a incendios forestales, se ha demostrado la eficacia del Proyecto Guardian» y añadió que «a pesar de haber habido varios conatos en la zona, el Guardian junto al resto de sistemas de prevención de incendios ejecutados por el Ayuntamiento de Paterna, no han pasado de simples alarmas». Por lo que, sin duda, «Guardian ha sido uno de los proyectos más emblemáticos de las últimas décadas en el área metropolitana de Valencia. Un proyecto innovador, sostenible y replicable a nivel internacional».
En la misma línea se pronunció Rober Raga al comentar que “se trata de un sistema pionero e innovador que puede ser replicable a otras zonas mediterráneas que tengan las mismas condiciones climáticas que la nuestra, con un alto grado de humedad y altas temperaturas, lo que nos orgullece haber implantado este proyecto, que además de preservar y proteger el medio ambiente, es viable económicamente”.
Si se habla de cifras, las instalaciones, que se según un convenio firmado entre ambos ayuntamientos por cuatro años prorrogable establece un sistema de costes de mantenimiento de las infraestructuras de uso común del Proyecto Guardian y garantizar el correcto funcionamiento, cuenta con una estación regeneradora de agua (ERA); cinco depósitos; cinco estaciones de bombeo (bombas, grupos electrógenos, fotovoltaica); 40 torres fijas con cañones de agua; 12,8 km de conducciones y elementos de maniobra.
A todos ellos hay que sumar una red de sensores, con un total de 40, entre los que se encuentran sensores detector de incendios, de estado biomasa forestal, estaciones meteorológicas y estaciones de calidad del aire. Así como tres sistemas de telemando para producción agua regenerada, telecontrol hidráulico, seguimiento de variables ambientales, control del riesgo de incendio y activación del sistema.