«No estamos creando una nueva movilidad. Ya existe», se arranca Max Hausmann. Con su proyecto YEP, Your Emobility Partner, está animando a un cambio con una base clara, la electricidad.
—¿Se cree la sociedad el cambio a la movilidad eléctrica?
—La sociedad aún no se la quiere creer. La movilidad eléctrica no es una novedad, de hecho ya somos usuarios desde hace años de trenes, metros o tranvías. Otra cosa, es si estamos abiertos a la innovación o a cambiar ciertos hábitos relacionados con la cultura de la propiedad del coche o de la moto y virar hacia el pago por uso. En este último punto, los datos científicos hablan por sí solos. Si haces un trayecto diario de 60 minutos (que es lo normal en ciudades españolas) tu coche está aparcado más del 95% del tiempo, ¡una completa aberración!
—¿Qué soluciones apoyan la implantación de esta nueva movilidad?
—Se ha hablado mucho de los de la movilidad del futuro (eléctrica, compartida, conectada y autónoma), yo en este caso suelo explicarlo como si se tratase de un taburete de tres patas. Pata uno social, segunda la ambiental y tercera la económica. Las tres causan un impacto en nuestra vida y su dependencia de unas con otras total.
—¿Cuál es el origen de Your Emobility Partner?
—YEP nace en Setiembre del 2019, como fruto de mi experiencia laboral, mayoritariamente en Desarrollo de Negocio para Pymes nacionales, de mis interés relacionado con el medio ambiente, cooperación, emprendimiento sostenible y los últimos 5 años en la empresas relacionadas con la movilidad personal.
—¿Cómo funciona YEP?
—Lo nuestro son las relaciones humanas, el trato con la gente. YEP cree en que un problema tiene diferentes soluciones, por ese motivo somos el puente de unión entre demanda (pymes) y oferta (proveedores especializados) y a su vez, ofrecemos soporte para impulsar la movilidad de las pymes hacia un modelo sostenible de una forma simple y sin complicaciones.
—¿Qué soluciones aportáis a las empresas interesadas?
—Podemos aportar valor de tres maneras diferentes. La primera por ayudar a fabricantes extranjeros a llegar al distribuidor adecuado sin necesidad de grandes inversiones en ferias o viajes comerciales. La segunda porque ofrecemos soluciones integrales a hoteles o empresas con flotas de vehículos mixtas y la tercera es que nuestra especialidad es ser el departamento externo de movilidad de una empresa privada, gestionando sus proveedores y aportando valor en su movilidad bajo unos objetivos definidos con gerencia.
—¿Cómo evaluáis los costes de movilidad? ¿Las empresas los tienen calculados?
—Disponer de los costes de movilidad, detallados y clasificados, es el punto de partida para hacer una evaluación de calidad, a tiempo y acotada en costes. Lo cierto, es que la mayoría de las empresas tiene los totales para su uso contable pero no ordenado por categorías. En estos casos, creamos unos procesos internos que ayudan al empresario a entender su coste de total movilidad (TCM – total cost of mobility). A partir de ahí, realizamos un análisis, proponemos un plan de acción y si el empresario quiere podemos ejecutarlo nosotros mismos.
—¿Cuál es el perfil de vuestros clientes en YEP: pymes o grandes empresas?
Hoy colaboramos con startups y pymes. Los dos motivos principales son por la rapidez en la toma de decisiones y por nuestra convicción de mejorar nuestra sociedad. Si queremos un cambio real a la movilidad sostenible/eléctrica, la llave está en la pyme. Nuestro tejido empresarial está formado en casi un 95% por pymes.
—Dentro de las soluciones eléctricas, el patinete ha sorprendido por su rápido crecimiento. ¿Cómo lo valoráis?
—El patinete ha sido el elemento sorpresa. Llegaron sin ruido y muchos conocidos tienen uno para uso personal. En nuestro caso, al trabajar principalmente con empresas privadas la demanda es mucho menor, pero solemos recibir peticiones en nuestra página web para que recomendemos algún modelo.
En la gran mayoría de los casos, mi recomendación suele depender del número de kilómetros por trayecto y del desnivel que se encuentra destino con origen. Pero, si tuviera que mojarme, para suelo urbano recomendaría Reby. Y para montaña, los Gravity Scooter, que son un híbrido entre MBT y patinete.
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